De Japón para los lobos grises

De Japón para los lobos grises

Teatro Carlos Pellicer
Concierto de soukyoku


Javier Cerón
Foto: Ricardo Ledesma

De pie y con aplausos, así reconoció la comunidad Bachiller el talento de Yoshiko Nishimura quien —en compañía de la flauta de Diego Julián Sánchez Méndez y el piano de César Gustavo Burgos Legorreta— ofreció un concierto de soukyoku, el 18 de mayo, en el Teatro Carlos Pellicer, como parte de las actividades del 50 Aniversario del Colegio de Bachilleres.

Ataviados con la prenda tradicional de Japón, el kimono, Nishimura, Sánchez y Burgos bajaron la parte superior del torso para saludar a su público y tomaron sus lugares en el escenario cuando la tarde iba cayendo: “Agradecemos esta valiosa invitación que nos brindaron para presentar el concierto de soukyoku, música para koto, arpa tradicional de Japón”, dijo Yoshiko Nishimura, quien, además de felicitar a la institución —en complicidad con su instrumento, el koto o sou—, comenzó el recital con la pieza Yamazato no haru (Primavera en el pueblo de la montaña) de Akira Morioka, la cual, precisó, consta de tres partes en las que se incluye una serie de canciones tradicionales para niños.

Posteriormente, interpretó Henyou (Transformación) de Katsuhiko Yoshizaki, a la cual se refirió como una obra interesante por sus marcadas transiciones de ritmo; le siguió Chidori no ikyoku (Suite de las aves marinas), que forma parte de una serie de cinco suites para koto que Kengyo Yoshizawa compuso, en 1856, con un estilo clásico para recuperar los orígenes de esa música basados en la elegancia y la sencillez; luego presentó una melodía de Katsuhiko Yoshizaki, Gradation (Colores en el viento), y Hokkai minyocho (Canción regional de Hokkaido) de Michio Miyagui.

Cuando el público pensó que la artista había agotado su repertorio, Yoshiko Nishimura —cuyo nombre significa “niña buena del pueblo del oeste”— dio paso a los primeros acordes de La Bikina, sin duda, la melodía más ovacionada por el público, que incluso, se animó a cantar.

Previo al recital, se realizó un homenaje a José Noel Pablo Tenorio, quien lamentablemente falleció el 10 de mayo, en el que el Maestro Víctor Sánchez González, Director General del Colegio de Bachilleres, resaltó su incansable entrega a la institución por casi 27 años y pidió a los presentes un minuto de silencio de pie en memoria de quien hasta esa fecha se desempeñó como Titular de la Unidad Encargada del Apoyo Jurídico.

Al respecto, afirmó que “el servidor público no tiene horario de labores ya que siempre debe estar a disposición del servicio y a las necesidades institucionales.

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