Los “alfas” de la manada 

Los “alfas” de la manada 

Ceremonia de excelencia del Plantel 6   
18 de octubre 


Javier Cerón 
Foto: Ricardo Ledesma 

Alcanzar la excelencia académica en la educación media superior implica un compromiso, enfoque y esfuerzo continuo. Por ello, 525 jóvenes del Plantel 6 Vicente Guerrero fueron objeto de un reconocimiento público por mantener un enfoque constante en su crecimiento académico y prepararse para futuros desafíos educativos y profesionales. 

En la primera de tres ceremonias celebradas en el auditorio del Tecnológico Nacional de México Campus Iztapalapa 1, el 18 de octubre, Rodrigo Nacef Mateos Nájera, director del Plantel 6, destacó que, de aproximadamente 3 500 alumnos que ingresan cada año, alrededor de 1 200 logran concluir sus estudios, por lo que instó a los presentes a seguir poniendo empeño en su formación para que —en un futuro próximo—, sean cada vez más los orgullosos egresados del recinto a su cargo. Asimismo, les recordó que todo lo que hagan o dejen de hacer, será en su beneficio o perjuicio, por lo que los invitó a aprovechar lo que el Colegio de Bachilleres les ofrece para forjarse un gran futuro. 

Luego de felicitar a sus compañeros, la alumna galardonada, Ángeles Betsabé Santiago Portillo, deseó que sigan manteniendo su disciplina y gusto por el saber para seguir creciendo como personas y aspirar siempre a ser mejores. Resaltó que cada uno de ellos sabe el esfuerzo que implica ser alumno de excelencia académica; sin embargo, agregó, aún faltan muchos retos por lo que hay que continuar preparándose para enfrentarlos.  

En representación de los docentes, Blanca Estela Carvajal Sánchez, profesora de la Academia de Ciencias Sociales, declaró que, durante cinco décadas, el Colegio ha sido como un faro de educación donde los jóvenes buscan conocimiento, crecimiento personal y la base para un futuro exitoso.  

Por otra parte, precisó que la excelencia no es un logro común, por lo que hay que celebrarlo al igual que su capacidad para inspirar a otros a seguir sus pasos, ya que su dedicación y determinación son testimonio de que el trabajo duro, la perseverancia y la pasión por el conocimiento pueden llevarnos lejos en la vida. Igualmente, enfatizó que la educación no sólo proporciona conocimiento, sino que también es el terreno fértil donde cultivamos valores esenciales para forjar ciudadanos responsables, honestos, constantes y disciplinados, y que, además, sean agentes de cambio positivo en sus comunidades y en el mundo.  

El subdirector del recinto, Ramón Delgado Urbán, se refirió a ese brillante grupo de estudiantes como todos unos profesionales porque, todos los días, se esmeran en hacer las cosas bien y con calidad, por lo que también son un ejemplo a seguir por el resto de sus compañeros. 

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